Francisco Melgar sobre DEMOLER (Luces - Diario El Comercio)
Por: Francisco Melgar Wong
El escritor Carlos Torres Rotondo acaba de editar esta minuciosa historia de la primera escena rockera del Perú. La narración, que incluye algunos pasajes autobiográficos de espíritu literario, se inicia en 1957 con el lanzamiento del primer 45 rpm de un cantante de rock nacional (Mike Oliver y su “Mambo Rock/Razzle Dazzle”) y prosigue ininterrumpidamente a lo largo de casi dos décadas, hasta el lanzamiento del último larga duración de esa primera hornada de músicos: el Vol. 2 de “Telegraph Avenue”. A través de entrevistas, documentos y un endiablado estilo de escritura, Torres nos cuenta la historia de los principales grupos que aparecieron en el Perú de esos años.
Allí están los fundacionales Saicos, cuya emblemática canción de guerra da nombre al libro; los siempre mutantes Shain’s de Pico Ego Aguirre; los impecables Belkings, considerados por la crítica especializada como uno de los mejores grupos de rock instrumental en todo el mundo; los altisonantes Yorks de nuestro Iggy Pop: Pablo Luna; el auge y la caída del excéntrico y autodestructivo Troglodita; los misteriosos Mad’s, cuyas desventuras en Londres al lado de los Rolling Stones y Jimi Hendrix constituyen el imprevisible centro nervioso del libro y —cómo no— la sinuosa y nebulosa historia de Traffic Sound, una de las mejores bandas de la época.
Un libro imprescindible para aquellos interesados en el rock, en la historia del Perú contemporáneo y en la evolución de las culturas juveniles latinoamericanas de finales del siglo XX.
DEMOLER
Autor: Carlos Torres Rotondo
Editorial: Revuelta
Nacionalidad: Peruana
Publicado en El Comercio
2 Comentarios:
AQUI TE ALUDEN Y PRETENDEN DEJARTE COMO UN CALUMNIADOR=
víctor coral dijo:
11-12-2009 13:11
Silvio: en este post has aceptado un comentario donde, absurdamente, un “anónimo” de esos que tanto, supuestamente, te disgustan, vuelve a la idea de vincularme con un blog basura, para limpiar al señor Yparraguirre.
Te pido que, como no es parte del tema y ese anónimo no tiene pruebas de lo afirmado -nadie puede tener pruebas de una mentira-, retires el comentario.
(En cuanto a los señores que años atrás me vincularon con esa letrina, los reto a que renueven sus acusaciones ahora.)
Atentamente,
Víctor Coral.
No voy a perder el tiempo averiguando quién pegó el comment; pero me he dado una vuelta por el Gran Combo Club y efectivamente Víctor Coral es quien pide esa rectificación.
Pues bien, cuando lancé esa acusación, hace ya bastante tiempo, estaba totalmente seguro de que él era el administrador del blog basura en cuestión. Soy humano y me puedo equivocar; si a Coral le genera tranquilidad que me retracte, pues caray, no me haré un mundo: disculpe señor Víctor Orlando Coral Cordero por haber sido tan malo con usted.
Ahora ya en "confianza":podría pedir una actitud similar de tu parte en cuanto a mí, como el pedirte pruebas de una supuesta denuncia de acoso que esgrimiste al defenderte aquella vez -cosa que jamás vas a encontrar, mucho menos probar (si esta existe, te reto -si gustas, eso sí- a que la muestres), porque entre otras cosas no puedo quejarme del afecto pasional siempre he recibido de muchísimas mujeres a lo largo de mi vida, y por libre albedrío de estas-.
No voy hacerme problemas de cosas mínimas, la verdad. Así es que Víctor, disculpa mi desatino de esa ocasión y que pases una feliz navidad y que el 2010 sea un año muy bueno para ti. Seguro que sí.
G.
Publicar un comentario
Suscribirse a Comentarios de la entrada [Atom]
<< Página Principal