Los años maravillosos
Durante un tiempo se me
dio por consumir fanzines. De los muchos que pasaron por mis manos, ninguno
como Sótano Beat. A la fecha es una proeza conseguirlos en su totalidad. Y no
es para menos, puesto que esta publicación es una referencia obligada para todo
aquel que quiera informarse y documentarse sobre los años maravillosos del rock
peruano.
Mucho se hablaba del
rock que se producía en los 50, 60 y 70. Más de un oyente se preguntaba,
mientras escuchaba disertar a los canosos testigos de la escena, si era o no
verdad tanta calidad, exceso, entrega y leyenda. Todo quedaba en la nebulosa y
en los condimentos de la imaginación. Los Shain’s, Zulu, El Troglodita, Los
York’s, Los Belking’s, Los Saicos, Traffic Sound, Los Steivos y muchas bandas e
interpretes más sonaban de cuando en cuando, intuíamos de la existencia de una
era secreta y a la vez genial; estaban los vinilos, sí, que cimentaban las
sospechas razonables de su veracidad. Sin embargo, no existía la documentación
escrita que nos permitiera acceder a lo que se hizo.
Ahora, en su cuarto de
hora estos protagonistas no pasaron nada inadvertidos, gozaron de prensa,
salían en televisión y realizaban conciertos. Sin embargo, esa resonancia
instaurada en el imaginario de su generación se opacó, las tinieblas impusieron
su mezquindad, enterrándola, desapareciéndola, ingresándola en un agujero
negro. Y aún cuesta entender por qué.
Pasaron los años y
tuvimos publicaciones que, en algunos casos, intentaron darnos luces de lo que
se hizo, hasta que apareció la biblia del rock peruano: Demoler de Carlos Torres Rotondo. Pero qué hay detrás de estos
libros, ¿acaso se escribieron solos?, ¿solo bastó la versión oral de los
canosos testigos? No. Detrás de su proceso de documentación estuvieron los
fanzines de Sótano Beat, que ahora gracias a Contra Cultura tenemos en formato
de libro una selección de artículos, entrevistas y reportajes, abarcando el
periodo de 1957 a 1983, interesándonos, en especial, lo que se produjo hasta
mediados de los 70.
Días
felices nos reconcilia con la vida. Gracias a Diego García
H., Hugo Lévano G., Luis Berrocal Inca y Roberto Gagliardi accedemos, ahora sí, y
para rato, a una muestra fehaciente de las piedras angulares del rock peruano.
1 Comentarios:
estupendo, así las nuevas generaciones añaden mas información a su formación musical de "nuestra vieja escuela" de rock, para variar poco difundida...
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