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En algunos días tendremos una nueva edición de la Feria Internacional del Libro de Lima.

Como bien sabemos, hay una nueva administración en la Cámara Peruana del Libro, de la que estoy seguro hará las cosas mejor que la anterior administración, que, sin faltar a la verdad, parecía una dictadura feminista en la que cundía la prepotencia y el capricho elevado a niveles risibles, por no decir huachafos.

Durante los días de feria voy a participar en algunas actividades. Cuando salga el programa oficial, haré un post sobre los días que estaré, a lo mejor algún lector (a) del blog se anime y así pactemos alguna conversa informal teniendo como punto de encuentro las salas de la feria.

Ahora, ni bien se anuncia la realización de esta feria del libro ya tenemos las primeras críticas, como los 5 soles que se cobrara para ingresar. Dos soles más que en ediciones pasadas. Este incremento me parece algo excesivo, pero tampoco me genera fastidio. Si se hace un incremento en el costo de entrada, imagino que será para mejorar ciertos servicios, como esos baños químicos que veíamos y olíamos en las ediciones anteriores, verdaderos focos infecciosos y una muestra irrefutable de pésimo criterio de parte de los organizadores.

En fin, joven narrador, proyecto de poeta, no te quejes de la vida por 5 soles, 5 soles que a diario te los gastas en vanidades. Junta tu plata, tanto para la entrada como para los libros.