Michelangelo Antonioni (tributo personal)

Día trágico el 30 de julio para los amantes del buen cine. Se nos fueron Ingmar Bergman y Michelangelo Antonioni. Como que se ha lamentado más la muerte de Bergman (ésa es mi impresión), pero yo siempre he sido muy entusiasta del cine del director italiano. Precisamente llegué a su trabajo a través de otro director, de Brian de Palma y Blow Out, con John Travolta, Nancy Allen y John Lithgow. Un pata me dijo que esa película era una homenaje a otra, de un tal Antonioni, y éste me animaba a verla por Vanessa Redgrave y Sarah Miles (es que él era (es) todo un hormonal). Y fue así que me gravé el nombre de Antonioni hasta que durante una semana del mes de marzo de 1999 La Filmoteca de Lima (cuando ésta se ubicaba en el Museo de Arte) programó todo un ciclo dedicado a este director, y claro, de cabeza tuve que ver esa película que sirvió de inspiración para Blow Out. Indefectiblemente que Blow Up es, por donde se le mire, inmensamente superior a la película de De Palma. Y como tenía que ser, la Redgrave y la Miles me obnubilaron (es que no era (soy) de piedra, pues). Pero la historia se me quedó muy grabada en la cabeza, tiempo después me enteré de que esta pela se basaba en el cuento Las babas del diablo de Julio Cortázar.

Hasta hace unos días estuve buscando los dvd´s de Antonioni que tengo. Como se podrá colegir, he visto varias veces Blow Up, El pasajero y La aventura. Si aún no conoces el cine de Antonioni, nunca es tarde. De mi parte subí una famosa escena de Blow Up entre David Hemmings y Sarah Miles. Un tributo tardío, indudablemente.