academia desconectada
Muchos dicen, y no sin razón, que a esta
nueva generación de mujeres y hombres peruanos le falta muchas cosas. Los más
pesimistas la tildan de inculta e ignorante, impresión que adquiere
consistencia cuando uno los escucha hablar, o cuando toma como modelos toda
representación popular teñida de ignorancia, malgusto y otras maravillas del
facilismo imbécil. No puedo contradecir esa realidad, pero tampoco puedo negar
que hay una facción que se destaca por su espíritu crítico y afán de
información.
Digo esto por lo que acabo de leer en el
portal IDL-Reporteros, que reproduce un artículo del diario El Búho sobre una
conferencia llevada a cabo el pasado sábado en el Palacio Metropolitano de
Bellas Artes de Arequipa. En el evento participaron los fiscales del caso Lava
Jato José Domingo Pérez, Rafael Vela, el juez Richard Concepción Carhuancho y
los periodistas Gustavo Gorriti y Graciela Villasis.
Hay muchas cosas que decir al respecto,
cada exposición estuvo signada por la legitimidad ética y moral. Pero sí me
gustaría subrayar lo siguiente: no es gratuita la presencia de jóvenes en el
evento, muchos de ellos estudiantes universitarios y de institutos. Qué mejor
respaldo moral que ese, que saluda y reconoce la capacidad y la dimensión ética
de los ponentes, en especial la del fiscal José Domingo Pérez, de quien no
olvidemos lo siguiente: meses atrás el catedrático sanmarquino Marcel Velázquez
cuestionó en Twitter su tesis a razón de un mal empleo de citas. No está mal
cuestionar faltas y errores, pero el dato fue aprovechado por la banda
congresal fujimorista, que emprendió una campaña de desprestigio contra Pérez
justo cuando las investigaciones estaban en su tramo más sensible. A lo mejor
Pérez no fue un alumno destacado, pero eso poco importa a la luz del trabajo
que viene realizando junto a los fiscales del caso Lava Jato, labor calificada
en el mundo entero como histórica, en donde cada fiscal se viene enfrentado a
un ejército de abogados consorciados al servicio de poderosas mafias
empresariales. Lo de Velázquez es una cruel metáfora de desconexión de la
academia con los sucesos que viene experimentando el país. Cuando esta opina, lo hace hasta las huevas,
embarrándose y delatándose de oportunista. Este país necesita una academia que
no se solace en la falsa consagración de veinte gatos, sino que sea activa y
coherente con sus principios: reflexionar y denunciar todo acto de corrupción.
De esta manera volverá a tener credibilidad.
0 Comentarios:
Publicar un comentario
Suscribirse a Comentarios de la entrada [Atom]
<< Página Principal